Antes de crear al hombre, Dios creó a los ángeles, seres espirituales e incorpóreos. Son criaturas muy inferiores a Dios, pero muy superiores al hombre. Tienen intelecto y libre albedrio, pero este último por solo un corto tiempo dentro del cual deben aceptar o negar a Dios. En número, Dios creó más ángeles que todos los seres humanos pasados, presentes y futuros.

La naturaleza de los ángeles es servir como mensajeros de Dios a los seres humanos. Entre sus funciones está iluminar la mente humana hacia la verdad e influenciarla con ideas santas. Pueden poner pensamientos, imágenes, recuerdos en la mente humana y su imaginación. También puede afectar sus pasiones, como por ejemplo causar inquietud en el hombre para ayudarlo a alejarse en situaciones perjudiciales. También pueden afectar al hombre en consolación, causando sentimientos de paz y alegría que mueven el hombre hacia Dios.

Son el ejército celestial de Dios a quien glorifican sin cesar y se dividen en 3 jerarquías y 9 coros:

Jerarquía I

• Serafines – Los más cercanos a Dios. Portadores de amor y luz. La palabra Serafin significa seres que arden y es plural de la palabra Saraf que signfica serpiente resplandeciente. Arden con amor hacia Dios. Se describen con seis alas, dos para cubrirse los ojos, dos para cubrirse los pies y dos para volar.
• Querubines – Poseen la plenitud del conocimiento divino. Son la voz de la sabiduría divina e iluminan a los coros menores de ángeles. Son los custodios y protectores de lugares y cosas sagradas, como el arco del pacto, y son los primeros en ser mencionados en la biblia.
• Tronos – Paz y sumisión. Son los más cercanos a la majestad divina. Transmiten el espíritu de Dios a los ángeles menores y al hombre.

Jerarquía II

• Dominios –  Reinan sobre todos los coros angelicales. Tienen a su cargo la ejecución de las órdenes de Dios y son más devotos específicamente al cuidado de los asuntos humanos.
• Virtudes – Llevan a cabo las ordenes de las denominaciones. Sus atributos son la fortaleza en el combate con el enemigo de la salvación del hombre. A través de ellos, Dios gobierna las estaciones, el cielo visible y los elementos en general.
• Poderes – Guerreros contra la maldad, lo demoniaco.

Jerarquía III

• Principados – Ejecutivos. Guardianes de las naciones. El coro que anuncia las cosas divinas.
• Arcángeles – Guardianes en las misiones del hombre
• Ángeles –  Mensajeros ordinarios. De ellos vienen los ángeles guardianes. Reflejan de una manera particular la bondad de Dios hacia el ser humano. Van a donde quiera la voluntad de Dios que vayan y jamás abandonan su cargo.

Los ángeles fueron creados buenos más no santificados, con conocimiento limitado. Conocen al hombre en su humanidad y su psicología, sin embargo solo cuando aceptan a Dios y su voluntad pueden recibir la visión beatifica de Dios, no obstante solo pueden saber lo que Dios les permite saber.

A diferencia de los hombres, los ángeles tienen claridad con respecto a las consecuencias de sus decisiones, por lo que solo se les permite pecar una sola vez. De no aceptar a Dios y su voluntad, la separación de Él es definitiva. El ser humano no tiene la claridad que tienen los ángeles por lo que puede ser perdonado muchas veces, siempre y cuando busque la redención.

Se desconoce el número exacto, pero se cree que la tercera parte de los ángeles, principal entre ellos Lucifer, se negaron a obedecer a Dios y en su rechazo de Dios también rechazaron el amor. Ante esta decisión, estos ángeles, ahora ángeles caídos, perdieron la gracia de manera irrevocable pero no el poder con el cual fueron creados.

Los ángeles caídos también pueden influenciar la mente del hombre con imágenes y recuerdos al igual que sus pensamientos y sus pasiones. Sin embargo, en este caso, no aportan iluminación o verdad a la mente humana, sino oscurecimiento y engaño. Ejercen todo su poder con el fin de separar al hombre de Dios, el amor y la verdad. Nunca han gozado de la visión beatifica de Dios y dejaron de ser sus mensajeros. Desde su caída son enemigos del alma humana.

San Pablo dijo, “Porque nuestra lucha no es contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los poderes de este mundo de tinieblas, contra las huestes espirituales de maldad en las regiones celestiales”. Si se toma en cuenta que entre los coros de ángeles están los Principados y Poderes, queda claro que está hablando de los ángeles, ahora demonios, que al principio pertenecieron al ejército de Dios.

No es posible asegurar que cada decisión o cada pensamiento de cada ser humano está influenciada por angeles o demonios. A veces los seres humanos simplemente toman malas decisiones sin ninguna malicia intencionada. No obstante, el estado actual del mundo no puede ser el resultado de simples errores.